Franquicias: Elementos

Básicamente los sujetos del contrato de franquicia son dos:
1) El otorgante de la franquicia se llama Franquiciante (franchisor)
2) El tomador o quien adquiere el derecho de uso del sistema se llama Franquiciado (franchisee).

Los elementos característicos de una franquicia son:
A.- Marca
El franquiciante detenta la propiedad de una marca y cede su uso al franquiciado quien no sólo debe usar esa marca sino los signos distintivos y seguir todas las instrucciones que indique el franquiciante.

B.- Know-How

Esta es una de las principales características del sistema, el “como hacerlo”. El franquiciante debe capacitar al franquiciado sobre como se desarrolla ese negocio de éxito, debe brindarle su “fórmula del éxito”.

El know-how se basa en conocimientos técnicos, procedimientos y conjunto de informaciones necesarias que proceden de la experiencia y que su autor mantiene en secreto sea para su uso o para transferirlos confidencialmente a un tercero.

La jurisprudencia francesa señala que el know-how debe ser práctico y probado en sus resultados, debe ser original, específico, en desarrollo constante y debe ser fácilmente transmisible.

En España se señala que esta transmisión de conocimientos debe ir acompañada fundamentalmente por un manual operativo.

La capacitación, el asesoramiento, la asistencia se refiere a todos los temas que hacen al negocio, sea la parte técnica de un desarrollo industrial o comercial, como la elección del lugar del establecimiento, la decoración, el entrenamiento del personal, su vestimenta, la atención, marketing, gestión del establecimiento, etc.

C.- Remuneración al Franquiciante

La contraprestación de los servicios otorgados por el franquiciante es una remuneración, que básicamente se integra con todas o algunas de las siguientes modalidades:
1. Derecho Inicial

En general se acostumbra a fijar un monto fijo inicial para tener derecho a la franquicia. Esta suma en parte compensa al franquiciante por todo lo invertido con anterioridad para poner en marcha el sistema de negocios bajo este método.

El monto inicial es recomendable que sea el menor posible porque la idea es construir un negocio rentable y que los beneficios surjan de un crecimiento común y no generar un pago inicial excesivo para obtener un lucro rápido y sin base sólida.

2. Regalías

Son pagos periódicos porcentuales respecto a una variable que se considera relevante, que por ejemplo puede ser ventas o utilidad y que acompaña la marcha del negocio.
El valor sobre el que se fija ese porcentaje no debe dar lugar a distintas interpretaciones, dado que este pago será la remuneración más significativa que el franquiciado le deba pagar al franquiciante.

Por ejemplo si nos referimos al término ventas o ingresos debemos precisar si estamos hablando de lo facturado o de lo percibido, lo mismo si pactamos un porcentaje sobre las utilidades, debe quedar perfectamente establecido si nos referimos a utilidades brutas o netas e incluso definir qué entendemos por cada una de ellas porque también podemos encontrar distintas interpretaciones, ya sea dentro de un mismo país o cuando hablamos de franquicias internacionales donde necesitamos más precisión aún.

Este valor debe ser lo suficientemente equilibrado para que sea conveniente a ambas partes, dado que estamos ante un contrato de colaboración y no de competencia por lo tanto el éxito de uno está íntimamente relacionado a la expansión del otro.

A veces en lugar de porcentaje se emplea una cuota fija o canon que se paga más allá de la evolución del negocio pero este sistema no responde al espíritu de crecimiento compartido que debe imperar en este sistema de expansión.
3. Otros pagos

Además del pago inicial y las regalías periódicas se pueden incluir otros pagos por servicios diversos, a saber: cursos de capacitación especiales, servicios administrativos como contabilidad e impuestos, publicidad, servicios y asesoramientos diversos que el franquiciante toma a su cargo por indicación del franquiciado.

D. Partes Independientes

Es fundamental esta característica que la relación que une al franquiciante con el franquiciado no es de dependencia sino que ambas partes son autónomas, a pesar que este por lo que estamos viendo está “subordinado” a seguir las instrucciones del franquiciante y este a su vez tiene la facultad de control sobre el seguimiento de las pautas fijadas.

E. Contrato de Colaboración

Este elemento está íntimamente vinculado al anterior, dado que ambos contratantes concurren libremente y prestan su consentimiento para desarrollar una actividad común pero con independencia y autonomía jurídica.
Estamos ante un contrato de colaboración o cooperación, donde ambos están interesados en el éxito de la franquicia y para eso necesitan estar juntos, ambos se necesitan para llegar al objetivo común.

F. Calidad de los contratantes

El franquiciante y franquiciado reúnen características especiales que los hacen distintos a otros. El franquiciante debe reunir determinados requisitos para que el franquiciado desee “asociarse económicamente “ con él y el franquiciado fue seleccionado porque se lo considera capaz de desarrollar el negocio correctamente, hacerlo crecer y que responda a las pautas establecidas.

No nos olvidemos que el franquiciado ante el gran público actúa como si fuera el franquiciante y no debieran existir diferencias, salvo en la parte legal, por eso por ejemplo una mala atención en un negocio de marca conocida, influirá en las personas sobre toda la marca y no exclusivamente sobre ese negocio.

De ahí que el contrato sea personal, y que si por cualquier motivo esas personas no pudieran ocuparse más en principio ese contrato no debiera ser transferible por esas características que son tenidas en cuenta para su celebración.

G. Zona asignada

El franquiciado debe desarrollar su negocio en una zona establecida. Esta porción de territorio debe tener la característica de ser lo suficientemente grande para producir la expansión del negocio pero a su vez debe estar limitada en función de la expansión de otras franquicias; para todos estos aspectos hay cláusulas de exclusividad a fin de asegurar al franquiciado la no competencia dentro de su zona.

Cuando esta asignación de zonas se hace incorrectamente,en muchos casos por un ánimo de lucro excesivo por el franquiciante, puede suceder y de hecho ha sucedido que una explosión de negocios desmesurada no sólo ocasiona la quiebra de alguno de ellos sino que por el efecto dominó la imagen de la marca comienza a decaer y franquiciados y franquiciante observan atónitos el “hundimiento del titanic”.

Hay un punto de equilibrio entre el inicio, desarrollo y expansión de la franquicia que es necesario que sea evaluado por expertos dado que la colaboración entre una red de negocios cada uno independientes pero a su vez con un objetivo económico común es una tarea compleja que requiere de un estudio detallado en cada caso y de esa forma disminuir los riesgos que toda actividad empresaria conlleva, mucho más cuando se utiliza un sistema de expansión de enorme potencial que hay que saber conducir con mucha destreza.

Share this post


MONEDA
USD
EUR
ARS
CLP
MXN
COP
PEN
BRL
UYU
BOB
Abrir chat
Hola 👋
¿Necesita ayuda? estamos online!